Turquía
Un país poco conocido
Turquía es un país fascinante situado en la intersección de Europa y Asia, y es a menudo descrito como un puente entre Oriente y Occidente debido a su diversa cultura y su ubicación geográfica. Creemos que no se le da la importancia suficiente en lo que a los viajes se refiere, pues únicamente Estambul y Capadocia reciben el reconocimiento y se llevan los millones de turistas anuales del país. No obstante, Turquía tiene muchos motivos para destacar y merecer una visita:
Su rica historia: Turquía ha sido hogar de antiguas civilizaciones, incluyendo los hititas, los frigios, los lidios y licios, los griegos, los romanos, los bizantinos y los otomanos. Esta herencia multicultural se ve reflejada en los numerosos sitios arqueológicos y monumentos históricos por todo el territorio, como por ejemplo, Éfeso o las ruinas de Troya. Igualmente, Estambul, antiguamente conocida como Bizancio y luego como Constantinopla, es una ciudad única en el mundo, que sirve como punto de encuentro entre el Este y el Oeste. Allí, la majestuosa Santa Sofía, la Mezquita Azul, la Torre de Gálata o el Gran Bazar, están en consonancia con una enorme ciudad cosmopolita, que se encuentra en plena modernización, y que tiene para todos los gustos.
Deliciosa gastronomía: la comida turca es famosa por su gran variedad de sabores, olores y utilización de especias, lo cual es un hecho que hemos podido comprobar en este viaje: desde el famoso kebab y el baklava, hasta los mezze, burek y el raki, la cocina turca ofrece una amplia gama de platos exquisitos que reflejan la diversidad del país.
Paisajes impresionantes: a lo largo de toda su extensión (un 50% más que la de España), Turquía cuenta con espectaculares montañas, largas playas, valles fértiles, e incluso, desiertos. Las peculiares formaciones rocosas de Capadocia, las increíbles calas de la costa mediterránea, desde Izmir hasta Antalya, y las poco visitadas montañas del noreste, son algunos de los lugares que el país tiene para explorar.
Amabilidad turca: los habitantes son conocidos por su simpatía hacia los foráneos, y nosotros así lo hemos experimentado. La cultura del té es una parte muy importante de la vida cotidiana, y es común que os inviten a compartir una taza de té como gesto de hospitalidad.
En las últimas décadas, Turquía ha experimentado un crecimiento económico significativo y manifiesta que quiere convertirse en una potencia económica. Sin embargo, no podemos obviar que el país no es una balsa de aceite. Turquía enfrenta tensiones étnicas y políticas importantes, y tiene grandes dificultades en asuntos económicos estructurales. También presenta problemas en cuestiones relacionadas con los derechos humanos y la libertad de expresión, derivados de la llamativa "islamización" promulgada en la "era Erdogan", que ha generado gran debate tanto a nivel nacional como internacional.
Aún y todo, Turquía es sin duda un país muy interesante para conocer con tiempo y es preferible explorarlo con calma, tal y como hemos hecho nosotros (pese a que nos han quedado muchísimos lugares por descubrir). Os dejamos aquí un resumen de toda la información que hemos podido encontrar y nuestras recomendaciones e itinerario, para que podáis hacer un viaje inolvidable.
Información básica
Capital del país: Ankara
Ubicación: limita con Grecia al este, el Mar Negro al norte, los mares Egeo y Mediterráneo bañan sus costas en el suroeste, y en el este hace frontera con Georgia, Armenia, Siria, Iraq e Irán.
Idioma: turco (casi nadie sabe inglés).
Moneda: lira turca
Gobierno: República Presidencialista
Clima: en la zona del Mediterráneo, veranos calurosos e inviernos suaves; en la meseta interior el clima es continental, con inviernos de frío y nieve, y veranos tórridos; en la Costa del Mar Negro el clima es húmedo y fresco, con bastantes lluvias durante todo el año. En Estambul el clima es variable según la época del año: los inviernos son fríos y húmedos, mientras que los veranos son cálidos y secos.
Zona horaria: UTC +3:00
Electricidad: enchufes tipo F (igual que en España)
Cómo organizar un viaje a Turquía por libre
Cómo moverse por Turquía
Dependiendo de cuántos y qué lugares se vayan a visitar, recomendamos una forma de trasladarse u otra.
Si solo vais a Estambul, lo mejor es moverse en transporte público e intentar evitar a toda costa entrar en coche. Podéis leer nuestro artículo de cómo moverse por Estambul.
Si se quieren visitar otras zonas del país, es posible considerar el alquiler de coche. Aunque se debe tener en cuenta que es un país extenso y que la cantidad de kilómetros a recorrer puede ser enorme. De hecho, nuestra idea inicial era alquilar un coche, pero nos surgieron varios problemas: primero, la cantidad de días que íbamos a estar en Turquía hacía que el precio fuese altísimo (las agencias de alquiler de coches no son muy abundantes). Segundo, la opción para devolverlo en otra ciudad diferente y no tener que retroceder era prácticamente inviable, el precio se triplicada (queríamos cogerlo en Izmir y devolverlo en la Capadocia). Tercero, que al tener que atravesar gran parte del pais, había cientos de kilómetros sin ningún lugar de interés. Por todos esos motivos, finalmente consideramos que alquilar coche no era la mejor opción para hacer un viaje largo por Turquía.
En su lugar, nos decantamos por movernos en transporte público que, generalmente, son autobuses grandes (como los que conocemos), u otros llamados dolmus, que son como mini-autobuses o furgonetas grandes. Estos últimos son muy típicos en Turquía y hay dolmus prácticamente para cualquier trayecto, incluso para llegar a playas alejadas o pueblos aislados. Después de más de dos semanas, podemos decir que es increíblemente sencillo trasladarse en transporte publico, y para nosotros, la mejor forma de recorrer el país, además de lo barato que resulta. Próximamente tendréis más información en nuestro artículo de consejos para recorrer la Riviera Turca, en el que especificáremos los medios de transporte que utilizamos.
Para buscar los trayectos en internet, existen muchas páginas distintas y al principio resulta un poco lioso. El mejor buscador turco es biletall.com, aunque ni siquiera en este aparecen todos los autobuses. En las estaciones siempre hay más opciones de las que aparecen en internet. Concretamente para buscar los dolmus, es todavía más complicado encontrar las rutas en internet, pero una vez se llega a cada pueblo, playa o destino en general, es fácil encontrar carteles con los horarios en todas las paradas.
Si desde Estambul voláis directamente a la Capadocia para estar varios días y luego regresar, sí que puede ser útil disponer de un coche de alquiler. Permite visitar cada rincón de esta peculiar región y da mucha más libertad. Se puede alquilar directamente en el aeropuerto Nevsehir y recomendamos la pagina Discovercars.com, que es la que mejores precios suele tener.
Por último, para recorrer tanto la zona norte como la sureste, no podemos hacer ninguna recomendación basada en experiencia propia, pero si fuéramos nosotros, seguramente las recorreríamos en transporte público.
Requisitos para entrar en Turquía
Siendo ciudadano de la Unión Europea, se puede acceder al pais tanto con Pasaporte como con DNI. No se necesita visado, ni hay que pagar ninguna tasa de entrada. Tampoco piden ninguna vacuna obligatoria.
En Turquía no solicitan demostrar un billete de salida del país, ni tampoco exigen tener reservas de hotel.
Cuándo ir a Turquía
Por lo general, finales de primavera o principios de otoño son los mejores momentos para viajar a Turquía. Aunque se debe tener en cuenta que es un país extenso y con una gran variedad de climas.
La zona norte del país, incluyendo Estambul, es la más fría y húmeda. Está bastante generalizada la idea de que la capital de Turquía es calurosa desde comienzos de primavera, pero no es así. Hasta mediados de mayo o más adelante puede hacer frío y hay que añadir que es una ciudad en la que no siempre el cielo está despejado. La niebla y la llovizna son bastante frecuentes. Si la visitáis entorno a Semana Santa (que suele ser habitual), seguramente no necesitaréis pantalones cortos, y mejor si lleváis algo de abrigo y paraguas.
Hacia el noreste, en la región de los Alpes Pónticos o "Alpes de Turquía", el clima es de montaña, incluso hay varias estaciones de esquí. El verano aquí suele ser templado.
En la costa oeste, el clima es mediterráneo, mucho más caliente y agradable que en el norte durante todo el año, excepto en verano, cuando las temperaturas fácilmente alcanzan los 40ºC. A partir de junio el mar está perfecto para el baño y la temporada se extiende hasta finales de noviembre (lástima que los días sean muy cortos en esta época). Es mejor evitar julio y agosto por la gran afluencia de turistas, sobre todo nacionales, que acuden durante las vacaciones.
El interior y el sureste del pais tienen un clima continental, con un invierno frío y un verano muy caluroso. En la Capadocia, es habitual que las mañanas sean muy frescas, incluso en abril y mayo, por lo que no olvidéis llevar siempre un buen abrigo. Al contrario, durante los días de verano, el calor en esta zona semi-desértica puede ser casi insoportable.
Cuánto tiempo ir a Turquía
Turquía es un país grande para los estándares europeos (su tamaño es como el de una España y media), por lo que la mayoría de veces resulta muy difícil o imposible verlo todo en un solo viaje. En el primer punto sobre cuándo ir ya hemos mencionado las diferentes zonas que hay para visitar, y aquí mostramos un resumen de cuánto tiempo se requeriría en cada una de ellas:
Estambul: recomendamos al menos cuatro días completos. Os dejamos nuestro itinerario de Estambul y consejos para visitar Estambul.
Norte de Turquía y costa el Mar Negro. No conocemos esta zona, pero con lo que nos hemos informado, se puede visitar lo más importante en unos diez días.
Riviera Turca (Mar Egeo y Mediterráneo). En total son más de mil kilómetros de costa, con decenas de pueblos con encanto, largas playas solitarias, calas de piedra, montañas de hasta dos mil metros de altitud y parques nacionales para hacer senderismo. Además de esto, alberga una gran cantidad de hallazgos arqueológicos de las antiguas civilizaciones Licia, Bizantina, Griega y Romana. La verdad que no se debe subestimar todo lo que tiene la Riviera Turca; en nuestro viaje de dos semanas vimos aproximadamente la mitad (desde la costa de Izmir hasta Kas). Tenemos pendiente escribir nuestro itinerario por la costa de Turquía.
Centro de Turquía. Comprende la mayor parte del territorio y es donde se sitúa la conocida Capadocia, un lugar geográficamente muy peculiar que recibe el mayor porcentaje de turistas del país tras Estambul. La Capadocia no es excesivamente grande y es suficiente con dos o tres días completos para recorrerla, sobre todo si se dispone de coche. Sin embargo, hay que tener en cuenta que está alejada del resto de lugares a visitar en Turquía, y lo más práctico es ir en avión, que tarda solo una hora (aunque solo hay conexiones directas con Estambul). Si se va desde la costa, se tardan como mínimo 10 horas en autobús.
Sureste de Turquía. La zona más desconocida del país es esta que hace frontera con Armenia, Irán e Iraq. Pero no por ello carece de lugares de interés. Nosotros no hemos tenido la oportunidad de visitarla, pero se recomiendan unos diez días para recorrer la región.
Cómo llegar a Turquía
Lo más habitual es entrar al país por Estambul, aunque hay otras ciudades importantes a las que llegan vuelos internacionales como Izmir, Dalamán, Antalia y Ankara, entre otras. Dependiendo de la ruta que queráis hacer, puede que merezca la pena mirar vuelos a estos sitios, que pueden estar mejor de precio o con menor numero de escalas.
Con respecto a Estambul, hay muchísimas combinaciones de vuelos posibles, ya que el Aeropuerto Internacional de Estambul (IST) es uno de los más transitados de Europa y del mundo. No vamos a mencionar todas las opciones porque realmente la mayoría de aerolíneas europeas tienen conexiones con Estambul.
Las dos compañías turcas más importantes del país son Turkish Airlines y Pegasus. La primera opera en este aeropuerto IST (inaugurado en 2018 y situado a 35 km de Estambul); la segunda es una aerolínea lowcost que tiene su base en el aeropuerto Sabiha Gökçen (SAW).
**No os confundáis con el antiguo aeropuerto Atatürk que actualmente solo cuenta con unos pocos vuelos nacionales y privados. Tenemos un artículo específico sobre cómo moverse por Estambul y llegar a los aeropuertos.
Otra forma de entrar en Turquía es mediante tren, autobús o coche. Algunos viajeros incluyen Estambul como última parada de un Interrail por Europa Oriental, de la misma forma que muchos Flixbus también llegan a la capital turca.
Por último, si llegáis con coche propio, tened en cuenta que la forma de conducir en el país es bastante anárquica, sobre todo en las ciudades grandes, y puede resultar muy agobiante y peligroso. No hace falta carnet de conducir internacional, ni ningún otro permiso especial.
Dónde alojarse en Turquía
A la hora de buscar hoteles en Booking.com, encontramos muchos menos de los que aparecían en GoogleMaps o Maps.Me, y de hecho, la mayoría de las reservas las hicimos mediante Agoda. Otro buscador que también es mucho más completo que Booking,com en Turquía es Trip.com. Aparte de estos tres buscadores, hay otros que no habíamos visto antes en ningún otro país, pero no los utilizamos para ninguna reserva.
*Nota importante: si preferís reservar los hoteles sobre la marcha y queréis hacerlo mediante Booking.com, es necesario disponer de una VPN, ya que en Turquía Booking.com no está disponible. Nosotros utilizamos CyberGhost que funciona bastante bien en todo el mundo. En cambio, si reserváis desde España o la mayoría de países, aparecen los alojamientos con normalidad.
En general, los alojamientos en Turquía tienen una relación calidad-precio aceptable, salvo en Estambul, donde son bastante más caros y los servicios mucho peores, en general. En todos los que estuvimos en el resto del país, la atención fue buena, la limpieza bien cuidada, y normalmente por aproximadamente 40 euros la noche, teníamos una habitación privada con desayuno incluido. Además, aclarar que el desayuno turco es prácticamente una comida; en todos hay ensaladas, patatas y vegetales a la brasa, huevos (alguna vez incluso menemen, una especie de pisto con huevo), varios tipos de quesos, embutidos, aceitunas, bizcochos, tortitas, mermeladas y más. Eso sí, para los viajeros más madrugadores puede ser un problema que el desayuno siempre lo sirvan más tarde de las 8.
Como hemos mencionado al principio, en la capital los alojamientos tienen un estándar de calidad bastante inferior en comparación con el precio. Hay miles de hoteles, pero la gran mayoría cuentan con valoraciones bastante pobres. Lo más importante a la hora de elegir hotel en la capital nos parece su ubicación, por lo que hemos dedicado un artículo específicamente a los mejores barrios de Estambul para alojarse. El rango de precios es amplio, hay desde pensiones de dudosa fiabilidad, hasta hoteles caros de lujo. Recomendamos empezar la búsqueda filtrando por barrios y por rango de precios para hacerlo un poco más sencillo.
Dinero en Turquía
Es un país que se ha modernizado mucho en este aspecto y, afortunadamente, la mayoría de pagos en los lugares turísticos se puede hacer con tarjeta. Todos los alojamientos y muchos restaurantes los pudimos pagar de esta forma. Solamente en algún comercio local, una excursión y varios trayectos en dolmus los pagamos con liras turcas. (Como ejemplo, los 300 euros que llevamos en efectivo para los dos nos duraron las tres semanas en Turquía).
La mejor forma de conseguir el poco efectivo necesario es cambiarlo en una casa de cambio (los bancos turcos no realizan esta operación actualmente). Estas tampoco aplican el cambio oficial, y siempre se pierde algo de dinero, pero casi nada en comparación con extraer directamente de un cajero turco. Las comisiones de los cajeros eran siempre altísimas, rondaban el 8%, así que recomendamos evitar tener que sacar dinero en Turquía.
Internet en Turquía
En Turquía hay varias compañías de móvil importantes, entre las que destacan Turkcell, Turk Telecom y Vodafone. Nosotros contratamos con Turkcell por ser supuestamente la principal y la más extendida en el país, pero no nos quedamos satisfechos. Además de ser muy cara (unos 25 euros por 25 GB), la cobertura 4G no era rápida en casi ningún sitio. Posiblemente las otras compañías tampoco sean mucho mejores, pero no tuvimos la oportunidad de probarlas.