Visitando Brujas y Gante, dos joyas medievales
Explorar las ciudades de Brujas y Gante es como retroceder en el tiempo a una era medieval de belleza y encanto inigualables. Estas dos ciudades flamencas en Bélgica son conocidas por sus impresionantes canales, su arquitectura gótica y sus calles adoquinadas llenas de historia. Son destinos perfectos para una escapada corta y fácil de alcanzar desde cualquier punto del país, y sus vibrantes escenas gastronómicas son el complemento ideal para un recorrido que combina historia, arte y sabor.
BÉLGICA






Llegando en tren: rápido y fácil
Bélgica cuenta con una excelente red ferroviaria que facilita mucho las visitas a Brujas y Gante. La frecuencia de los trenes y la rapidez del sistema ferroviario belga hacen que sea fácil y cómodo explorar ambas ciudades en un mismo viaje.
Desde Bruselas: tanto Brujas como Gante están a aproximadamente 30 minutos en tren de Bruselas. Si estáis llegando desde el aeropuerto de Zaventem, hay trenes directos desde allí, lo que os permitirá llegar a vuestro destino en poco tiempo. Si estáis por Bruselas, no os podéis perder nuestro artículo con lo imprescindible de la capital belga.
Desde Liège y el extremo alemán: Liège es otra excelente opción de conexión, con trenes hacia Bruselas y, desde allí, conexiones directas hacia Brujas y Gante. La duración total del trayecto suele ser de menos de dos horas. También sirve si llegáis desde ciudades cercanas a la frontera como Aachen (Alemania) o Maastricht (Países Bajos). Si tenéis pensado visitar Liège, tenéis disponible un artículo sobre la Ciudad Ardiente en nuestra web.


¿Y qué ver en Brujas?
A la ciudad se la conoce como la “Venecia del Norte” ya que es famosa por sus canales pintorescos, su centro histórico y su atmósfera mágica. Os resumimos lo imprescindible:
La plaza del mercado y la torre Belfort son el corazón de Brujas y el punto de partida perfecto para vuestra visita. Desde aquí, la Torre Belfort ofrece vistas panorámicas de la ciudad que valen la pena subir sus 366 escalones.
El Lago del Amor (Minnewater) está rodeado de jardines y es ideal para un paseo romántico y tranquilo.
Los famosos canales: un recorrido en barco por los canales de Brujas es una experiencia imprescindible para admirar la ciudad desde una perspectiva única.
Dónde comer
De Halve Maan Brewery: esta cervecería con más de 500 años de historia es una parada obligada para los amantes de la cerveza. Podréis disfrutar de una visita guiada y probar su famosa Brugse Zot, una cerveza local artesanal.
The Old Chocolate House: este es el lugar ideal para los amantes del chocolate. Ofrece una de las mejores tazas de chocolate caliente de la ciudad y una amplia variedad de bombones.
Chez Albert: si queréis probar un auténtico gofre belga, este lugar es altamente recomendable. Sirven gofres crujientes y recién hechos con diferentes toppings a elegir.
Dónde comer
Kaffee de Planck: como ya sabéis, este encantador café junto al río es perfecto para una pausa relajada. Con su terraza al aire libre y su ambiente acogedor, es el sitio ideal para disfrutar de una cerveza belga mientras contempláis las vistas del río Lys. Uno de los lugares a los que volver siempre que se visite Gante.
Dulle Griet: ubicado en el centro de Gante, este bar es conocido por tener una de las cartas de cervezas más amplias de la ciudad. El ambiente es acogedor y peculiar, con detalles como la famosa tradición de “las zapatillas de cerveza”: os pedirán dejar una zapatilla como “fianza” si pedís una cerveza servida en su enorme copa.
Tierenteyn-Verlent: para probar algo verdaderamente local, os recomendamos esta tienda de mostazas artesanales que data del siglo XIX. Aunque no es un restaurante, podéis probar su famosa mostaza, y además venden conservas y otras especialidades perfectas como souvenires gastronómico de la ciudad.
Julie’s House: para los amantes de lo dulce, este lugar es una verdadera joya. Especializado en pasteles y tartas caseras, ofrece una gran variedad de opciones, desde pasteles de frutas hasta cheesecakes y brownies, ideales para un brunch o una pausa dulce en cualquier momento del día.
Het Waterhuis aan de Bierkant: este bar junto al canal es otro lugar imperdible para los amantes de la cerveza. Con una selección de cervezas locales y artesanales, este es un sitio muy popular entre los locales y los visitantes. La terraza ofrece vistas al canal y el ambiente es auténtico y acogedor.
Consejos para disfrutar de ambas ciudades
Recorridos en barco
Tanto en Brujas como en Gante, los recorridos en barco por los canales son una forma excelente de ver la ciudad desde una perspectiva única y relajada. En ambas ciudades, los barcos operan en diferentes idiomas y ofrecen una experiencia guiada que os permitirá conocer más sobre la historia y los monumentos principales.
Paseos nocturnos
Las iluminaciones nocturnas en Gante son espectaculares, especialmente en los muelles de Graslei y Korenlei, que se ven mágicos al anochecer. Brujas también brilla por la noche, con sus canales y edificios iluminados, creando un ambiente íntimo y tranquilo.
Probad los dulces locales
Los gofres y el chocolate belga son imperdibles en ambas ciudades y en todo el país, pero también podéis probar los famosos cuberdons (conos de azúcar rellenos) en Gante, un dulce típico que muchos belgas consideran una delicia.


Nos vamos a Gante
Y es que Gante es una ciudad universitaria vibrante con un impresionante legado medieval y una vida cultural animada que no se visita tanto como Brujas. Aún y todo, cuenta con multitud de atracciones:
Castillo de los Condes de Flandes (Gravensteen): este castillo medieval es uno de los monumentos más destacados de Gante. Podréis explorar sus murallas y torres y disfrutar de vistas espectaculares de la ciudad.
La Catedral de San Bavón: hogar del famoso retablo “La Adoración del Cordero Místico” de los hermanos Van Eyck, es un imprescindible para los amantes del arte.
El Muelle de las Hierbas y los Granos (Graslei y Korenlei): estas dos calles paralelas siguiendo el curso del río Lys son ideales para pasear y disfrutar del ambiente único de Gante. Flanqueadas por antiguas casas gremiales, bares y restaurantes, Graslei y Korenlei son el alma de la ciudad y un lugar perfecto para una pausa o una foto memorable.
Como veis, Brujas y Gante son dos ciudades encantadoras que combinan el encanto medieval con una vibrante oferta gastronómica y cultural. Desde los pintorescos canales de Brujas hasta la animada vida nocturna de Gante, ambas ciudades ofrecen experiencias únicas y complementarias que harán de vuestra visita algo inolvidable. Con un acceso sencillo en tren desde varias ciudades de Bélgica, estos destinos son ideales para una escapada corta llena de historia, sabores y belleza arquitectónica.





