Uzbekistán

a large building with a tall tower in the background

Viaje por la ruta de la seda

Uzbekistán es el país más poblado de Asia Central, conocido por ser una punto clave en la ruta de la seda y tener una gran importancia histórica, sobre todo a partir de la Edad Media. Se encuentra en pleno corazón del vasto continente, rodeado por Kazajistán, Tayikistán, Kirguistán, Turkmenistán y Afganistán.

La región que en la actualidad corresponde Uzbekistán fue habitada desde la antigüedad por poblados y nómadas, y ha sido testigo de la influencia de diversas civilizaciones, incluidas la persa, la griega, la árabe y, finalmente, la turca. Esto es visible en el país: la diversidad étnica, lingüística y el amplio abanico de costumbres y culturas, son una de las cosas que más nos han sorprendido de Uzbekistán. Además, el hecho de haberse convertido en lugar de cruce indispensable para la ruta de la seda, ha provocado que muchas ciudades mantengan un legado cultural y arquitectónico inigualable.

Samarcanda, Bukhara y Khiva fueron importantísimos puntos de comercio y culturales hasta hace unos pocos siglos, e incluso llegaron a ser consideradas como algunas de las ciudades más importantes del mundo. En ellas encontraréis innumerables madrasas, mezquitas, mausoleos y bazares que reflejan la relevante historia y la influencia recibida de diversas civilizaciones que llegaron por estas zonas. Lugares como la Plaza Registán en Samarcanda y el Complejo de la Mezquita Kalyan en Bukhara son ejemplos de la arquitectura islámica en su época más álgida que os dejarán con la boca abierta.

Uzbekistán obtuvo su independencia de la Unión Soviética en 1991 y desde entonces ha experimentado muchos cambios en su política, economía y sociedad. Sin embargo, sigue siendo uno de los países más herméticos del mundo, una república parlamentaria sobre el papel, pero en la que el único partido legal es el que está en el poder. Una sociedad completamente desigual, basada en sectores como la agricultura, la minería y la producción de energía. El país es bastante rico en recursos naturales, como el gas natural y el algodón, pero la gestión que se ha hecho desde la época soviética no ha sido eficiente en absoluto y apenas ha dejado riqueza a sus habitantes.

Hoy en día, Uzbekistán está emergiendo como un destino turístico popular, atrayendo a viajeros de todo el mundo debido al importante patrimonio y legado cultural que tiene por ofrecer. Sin embargo, hemos podido comprobar que a día de hoy (2024), el turismo internacional que recibe no es en realidad significativo, y además, en su gran mayoría se compone de viajes organizados que, en definitiva, poco aportan a los ciudadanos uzbecos.

Os recomendamos que le echéis un vistazo a lo que os vamos a contar de primera mano sobre este país tan peculiar, para que podáis preparar vuestra primera incursión en Asia Central. ¿Estáis preparados?

Información básica

Itinerario sugerido

ÍNDICE

Cómo organizar el viaje

Artículos del blog

Información básica

Capital del país: Tashkent
Ubicación: Asia Central
Idioma: uzbeko
Moneda: Sum
Gobierno: República Presidencialista con partido hegemónico (sistema dictatorial)
Clima: clima continental extremo
Zona horaria: UTC +5:00
Electricidad: enchufes tipo C/F (igual que en España). 220V, 50hz

Cómo organizar un viaje a Uzbekistán por libre

Requisitos de entrada

Teniendo pasaporte español la entrada a Uzbekistán es libre y sencilla. No se requiere visado en estancias inferiores a 90 días y tampoco se paga ninguna tasa. No solicitan tener seguro medico, ni se pide la cartilla de vacunas, ni otro tipo de documento. Además, a la entrada del país no solicitan el primer alojamiento, ni hacen ninguna otra pregunta "extraña".

*A fecha de 2024, el único país de Asia Central que requiere visado (además de otros requisitos), es Turkmenistán. Para Kirguistán, Tayikistán y Kazajstán no es necesario.

Cuándo ir a Uzbekistán

El clima en Uzbekistán es continental extremo, siendo muy frio en invierno y muy caluroso en verano, con una gran variación térmica del día a la noche. Por lo tanto, sin duda la mejor época para visitar el país es la primavera y el otoño: abril - mayo y septiembre - octubre.

Cuánto tiempo ir a Uzbekistán

A pesar de su tamaño no muy inferior al de España, con dos semanas pensamos que es suficiente para visitar los lugares más emblemáticos e interesantes del país. En el siguiente apartado os dejamos nuestro itinerario sugerido. A parte de las cuatro ciudades turísticamente relevantes, el resto del país, lamentablemente, es muy complicado de visitar. Apenas hay información de cómo llegar a lugares remotos y los uzbekos tampoco suelen ayudar mucho al visitante, porque casi nadie habla inglés y probablemente no conciben que alguien de fuera quiera llegar a una ciudad fuera del circuito habitual. Además, se podría decir que Uzbekistán no destaca por su belleza ni sus paisajes; sin duda lo mejor es callejear y disfrutar de Jiva, Bujara, Samarcanda y Tashkent. Si por el contrario, decidís ir a otras zonas más desconocidas del país, como el valle de Fergana o el Mar de Aral, sería necesario disponer de tres semanas como mínimo.

Cómo llegar a Uzbekistán

En avión: el país cuenta con aeropuertos internacionales en Urgench, Samarkanda y Taskent. Lo más habitual es empezar el viaje por Tashkent, la capital. Sin embargo, nosotros empezamos por el extremo oeste, en la provincia de Khorezm. La ciudad de Urgench tiene un pequeño aeropuerto con varios vuelos internacionales semanales y aprovechamos para volar directamente desde Estambul. Desde Urgench a Khiva fuimos en un taxi que está a una hora de camino por 15$. Para ir en transporte publico, primero hay que llegar desde el aeropuerto a la estación de autobuses de Urgench en taxi (unos 2€), y de allí coger una marshrutka (mini-autobús típico de los pauses ex-URRS) que cuesta aproximadamente 1€.
Samarcanda es otro aeropuerto con bastantes más vuelos internacionales. Es mucho más moderno y amplio que el de Urgench, y tiene vuelos a varias ciudades turcas y rusas, entre otras. Cabe mencionar que algunas de las aerolíneas que operan en Samarkanda son low-cost y puede que merezca la pena echarles un vistazo, ya que generalmente los vuelos a Uzbekistán son bastante caros. De hecho, nosotros utilizamos este aeropuerto para regresar y volamos con la compañía Sunexpress de Samarcanda a Izmir por solo 100€.
Por ultimo, el aeropuerto principal del país se encuentra en la capital, Taskent. Tampoco es que disponga de una infinidad de destinos, pero sí que es, con diferencia, el más grande del país. Suele ser la puerta de entrada para la mayoría de viajeros que llegan a Uzbekistán, y normalmente, también la vía de salida. Está ubicado cerca de las dos estaciones de tren principales (la regional y la de líneas de largo recorrido) y es fácilmente accesible desde el centro de Taskent, tanto en Metro, como en taxi (recomendamos encarecidamente la aplicación Yandex Go, que funciona como Uber en Uzbekistán y es extremadamente barata). La aerolínea principal del país es Uzbekistan Airways, que tiene vuelos sobre todo a Turquía, a otros países de Asia Central (sobre todo Biskek) y a muchas ciudades de Rusia.

Por tierra: hay fronteras terrestres con todos los países que rodean al país: Rusia, Kazajstán, Kirguistán, Tayikistán, Turkmenistán y Afganistán. Nosotros no conocemos los detalles al respecto, pero os recomendamos los siguientes blogs en caso de que os interese cruzar en coche a alguno de estos países. Eso sí, tened en cuenta que si salís de Uzbekistán y luego queréis volver a entrar desde cualquier país de estos, necesitaréis un visado para poder hacerlo (la entrada libre de visado solo es para la primera vez). Estos son los mejores blogs que hemos encontrado sobre el tema: Cómo cruzar la frontera a Kirguistán y cómo hacerlo en la frontera de Tayikistán.

Cómo moverse por Uzbekistán

El tren es la mejor forma para trasladarse por el país, aunque tampoco penséis que es perfecta. Tiene bastantes inconvenientes como que en temporada alta (abril-mayo y septiembre-octubre) hay que reservar con antelación porque se llenan, y si sois de los que os gusta planificar sobre la marcha, tened esto muy en cuenta. Se pueden consultar los horarios y comprar los billetes únicamente en https://eticket.railway.uz/en/pages/trains-page. De momento, la página no deja reservar con más de un mes de antelación, así que tendréis que andar atentos.

Existen dos tipos de trenes diferentes: los nuevos Trenes de Alta Velocidad que se llenan aún más rápido y que no cubren el tramo Bukhara-Khiva, y los trenes normales, en los que suele ser más fácil conseguir asiento sin tanta antelación y los suele haber con mayor frecuencia.

Estos son los tramos que habitualmente se suelen cubrir en tren:

Taskent - Samarkanda: el que más trenes tiene al día, aunque pueden estar completos, sobre todo si son de AV. Por otro lado, no suele ser tan difícil coger uno de los normales, que suelen salir con mucha más frecuencia (un tren la hora), aunque tardan casi el doble que los TAV.
Samarkanda - Bukhara: este es el trayecto más complicado en cuanto a conseguir asiento en el tren. No salen con tanta frecuencia como el anterior, pero la demanda es casi tan grande, así que es posible que os quedéis sin una plaza. Tardan solamente dos horas, en cambio en autobús, se tardan casi cinco horas.
Bukhara - Urgench / Khiva: primero, aclarar que la ciudad que recomendamos visitar es Khiva y no Urgench. Esta no es más que la capital de la provincia de Khorezm, donde está el aeropuerto, y realmente no tiene nada interés. El tren primero para en Urgench y luego continua hasta la ciudad de Khiva. De momento, no hay línea de Alta Velocidad, aunque sea el trayecto más largo del viaje (son 7 horas desde Bukhara a Khiva). Además, solo hay 1 o 2 salidas diarias (consultad la web porque a veces hay un tren nocturno). Este trayecto sí o sí se recomienda hacerlo en tren, ya que las carreteras que unen ambas ciudades están en pésimas condiciones, además de que el camino es todo desierto. Afortunadamente, no suele haber tanto problema como con las otras dos rutas para conseguir un sitio en el tren.

Habitualmente, la opción de ir en autobús es peor que la del tren; las carreteras en las zonas rurales no están en buen estado y normalmente se tarda el doble que en tren. Sin embargo, debido a la alta demanda de los trenes, a veces no queda más remedio que recurrir al autobús. A menudo son marshrutkas y no autobuses como tal. Estas son pequeños autobuses o furgonetas típicas de los países exsoviéticos. No suelen tener horario fijo y salen cuando se llenan de gente. A menudo tampoco tienen un cartel en el que se especifique el recorrido que hacen, y es necesario preguntar al conductor o a cualquier pasajero si va al destino que estáis buscando. Normalmente salen de las estación principal de marshrutkas de cada ciudad, pero es mejor preguntar en el alojamiento antes de ir a buscar el sitio concreto. En internet apenas hay información acerca de las rutas, horarios y precios, pero esto no quiere decir que no las haya. Ciertamente, hay marshrutkas a todas partes y los uzbekos las utilizan todo el tiempo.

Alquilar coche: no creemos que sea una opción viable en un país como Uzbekistán, con tan poca densidad de población, donde el 80% del territorio es desierto y la mayoría de la población vive en zonas urbanas. Durante nuestro viaje de dos semanas, no hemos visto a ningún turista viajando en coche de alquiler.

Viaje organizado: con mucha diferencia, la gran mayoría de los visitantes de Uzbekistán van en grupo. Es cierto que no son los típicos grupos de turistas inexperimentados y poco respetuosos, sino que normalmente es gente que ya ha viajado bastante y sabe comportarse. A nosotros no nos parece mala idea conocer este país en viaje organizado; sin embargo, queremos dejar claro que es muy fácil hacerlo por libre. Los lugares de interés están muy bien indicados (casi ningún viajero se sale de la ruta establecida), y realmente tampoco son tantos. Los cuatro sitios imprescindibles son Taskent, Samarcanda, Bukhara y Khiva, a los que pocas veces se añade el Valle de Ferganá o el Mar de Aral. A parte de estos, no se suele visitar nada más. Si vais a Uzbekistán por libre, seguramente tampoco iréis a otros lugares que no sean los recién mencionados.

Lo que sí está claro es que haciéndolo por vuestra cuenta, además de que ahorraréis prácticamente la mitad del coste, vais a tener muchísima más libertad de movimiento y podréis estar más días en cada una de las maravillosas ciudades históricas. Nos parece que los viajes organizados a Uzbekistán se hacen excesivamente rápido y creemos que es un país para dedicarle un poco más de tiempo y poder asimilar una cultura tan diferente y rica, que normalmente es la primera vez que el viajero la vive.

Consejo: descargaros la aplicación YandexGo para poder pedir taxis en Bukhara, Taskent y Samarcanda. Es muy barato, funciona igual que Uber, y podréis ahorrar mucho tiempo viajando de punta a punta de las ciudad. A menudo, las atracciones están bastante alejadas unas de otras y YandexGo resulta muy práctico.

Dónde alojarse en Uzbekistán

Es un país en el que no hay gran variedad en las opciones de hospedaje, probablemente porque la estricta regulación y un control total sobre los establecimientos turísticos. Los hoteles y las guesthouse están sorprendentemente bien, en general, y tienen una estupenda relación calidad-precio.

En las ciudades turísticas, las guesthouse suelen costar entono a los 30€ la noche, y suelen ofrecer una habitación privada con todas las comodidades (incluso aire acondicionado), incluyendo un abundante desayuno uzbeco. La única pega de estas casas de huéspedes es que los anfitriones casi nunca hablan ingles. Pero aun así, se esfuerzan por hacerse entender y dar un buen servicio.

Por otro lado, están los hoteles que normalmente son de rango medio y el precio suele ser similar a las guesthouse. A veces cuentan con piscina y el desayuno es más variado que en las casas de huéspedes, pero no tienen tanto encanto, ni están tan bien ubicados cerca de los centros históricos. En general, no abundan los hoteles de rango muy bajo, ni tampoco los muy superiores, a excepción de unos pocos en Tashkent y Samarcanda.

Internet

Como siempre solemos decir, nuestra recomendación es que nada más lleguéis a un nuevo país, compréis una tarjeta SIM local para poder estar comunicados y tener internet en cualquier parte. En Uzbekistán, las principales compañías de móvil son Beeline, Uztelecom, Mobi.UZ y Ucell. En principio, Beeline es la más importante y la que mayor cuota de mercado tiene, pero nosotros nos decantamos por Ucell y fue un total acierto. La compramos nada más aterrizar en el aeropuerto de Urgench por 5€ e incluía datos prácticamente ilimitados. Nos funcionó estupendamente, y además, vimos más tiendas de esta compañía que de otras por todo el país. Tened en cuenta que, elijáis la compañía que elijáis, la conexión no suele ser demasiado fuerte y ni muy rápida.

Dinero

Como dato, la moneda local es el sum y está totalmente devaluado. Es posible realizar pagos con tarjeta en algunos lugares turísticos, pero en general no está demasiado extendido.

En caso de que llevéis dinero en efectivo, lo ideal sería llevar dólares, ya que en algunos hoteles los aceptan sin tener que cambiarlos. Si tenéis euros como nosotros, podréis cambiarlos en todos los bancos (hay varios en todas las ciudades principales) y en las casas de cambio, que son mucho menos abundantes. Si lo podéis evitar, no cambiéis ni en aeropuertos ni en hotel, porque la tasa de cambio siempre es mucho peor.

Por otro lado, al extraer de los cajeros se añade una comisión de un 1,5%, en general (aunque uséis la N26 o Revolut), lo cual está bastante bien comparando lo que suelen cobrar en la mayoría de países. Además, es muy fácil encontrar varios, al menos en todas la ciudades turísticas.

Seguridad

Uzbekistán es un país extremadamente seguro (que no os confunda la terminación -stán). Al igual que el resto de países de Asia Central, el índice de violencia y criminalidad es bajísimo, y tampoco son zonas en las que abunden el timo al turista o la picaresca. En general, la gente en honrada y muy respetuosa; aunque el primer contacto con los habitantes pueda parecer algo frío y distante.

No hay ningún peligro en caminar de noche, ni siquiera para mujeres que viajen solas. De hecho, para nuestra sorpresa, es típico salir a pasear a partir de las ocho de la tarde, pero eso sí, no siempre es fácil encontrar un sitio para tomarse una cervecita.