Un fin de semana por Montevideo
Montevideo, la capital de Uruguay, es una ciudad que fusiona tradición y modernidad con una identidad única en Sudamérica. A orillas del Río de la Plata, ofrece al visitante una variedad de lugares históricos, culturales, y espacios al aire libre que la convierten en un destino muy recomendable para una escapada de dos o tres días.
URUGUAY


Si bien Montevideo no es tan grande como otras capitales sudamericanas, su encanto radica en la tranquilidad de sus calles, en el ritmo pausado de su gente y en la mezcla de estilos arquitectónicos que reflejan su rica historia. Aquí os dejamos una guía con nuestra propuesta para disfrutar de todo lo que esta ciudad tiene para ofrecer.
Día 1: Ciudad Vieja y el corazón de Montevideo
Lo más recomendable es comenzar el recorrido en la Plaza Independencia, uno de los lugares más importantes de Montevideo y el punto de inicio de la Ciudad Vieja. En esta plaza podréis ver la emblemática estatua de José Artigas, héroe nacional uruguayo, y su mausoleo subterráneo, que se puede visitar gratuitamente. Aquí también se encuentra la Puerta de la Ciudadela, uno de los últimos vestigios de la antigua muralla que protegía a Montevideo en tiempos coloniales.
A pocos metros de la Plaza Independencia encontraréis el Teatro Solís, el teatro más antiguo y prestigioso de Uruguay. Su elegante arquitectura neoclásica y su historia hacen que sea uno de los lugares más destacados de la ciudad. Podéis hacer una visita guiada para conocer el interior, sus impresionantes salas y aprender sobre la historia de este lugar. Hoy en día sigue ofreciendo espectáculos de ópera, teatro y música en vivo.
Día 2: la Rambla, barrios históricos y cultura contemporánea
Seguramente la comenzaréis a explorar el primer día, pero no hay nada más típico que recorrer la Rambla de Montevideo, que se extiende por unos 22 kilómetros a lo largo de la costa del Río de la Plata. Por la mañana, podéis dar un paseo por la Rambla desde la Ciudad Vieja hasta el Parque Rodó, disfrutando de las vistas al río y de la brisa matutina. A lo largo de la Rambla, encontraréis ciclistas, pescadores y familias que se reúnen para tomar mate en un ambiente relajado. Si os animáis, dadle un tiento al mate, un gusto adquirido que a lo mejor no os entusiasma de primeras, pero que nosotros seguimos tomando algunos años después.
Como comentábamos, el Parque Rodó es la siguiente parada, uno de los parques más emblemáticos de Montevideo. Es un lugar ideal para descansar, hacer un picnic o dar un paseo por sus amplios jardines. En el parque encontraréis un lago donde podéis alquilar barquitos y una feria artesanal los fines de semana. Además, muy cerca se encuentra el Museo Nacional de Artes Visuales, que alberga la mayor colección de arte uruguayo, con obras de artistas como Torres García y Pedro Figari.
Volviendo a la Rambla, llegaréis al barrio de Pocitos, una de las zonas más modernas y cosmopolitas de Montevideo y que está muy de moda. Aquí podréis disfrutar de la playa de Pocitos, la más popular de la ciudad, y relajaros tomando el sol o paseando por la Rambla. Pocitos también es conocido por sus elegantes edificios, tiendas y cafeterías donde podréis hacer una parada y disfrutar de un café con vistas al río.
La Peatonal Sarandí es el alma de la Ciudad Vieja, uno de nuestros lugares favoritos en la ciudad. Se trata de un paseo peatonal que conecta la Plaza Independencia con el Mercado del Puerto y a lo largo de esta calle encontraréis galerías de arte, tiendas de artesanías, cafeterías y artistas callejeros. Recomendamos caminar por ella y recorrerla con mucha calma para disfrutarla al máximo. No dejéis de visitar alguna de las galerías de arte y tiendas de antigüedades, donde podréis llevaros algún recuerdo singular de Montevideo.
En vuestra caminata por Sarandí podéis hacer una parada en el Museo Torres García. Este museo está dedicado a Joaquín Torres García, uno de los artistas uruguayos más influyentes, quien desarrolló un estilo único llamado "constructivismo universal". Aquí podréis admirar sus obras y aprender sobre la historia del arte en Uruguay y en Latinoamérica. Es una visita ideal para quienes disfrutan del arte moderno, pero también para entender un poco mejor las figuras influyentes de la cultura uruguaya.
Este es un lugar que sí o sí tenéis que visitar. Para la hora de la comida, nada mejor que dirigiros a este lugar tan emblemático para saborear la auténtica parrilla uruguaya. El Mercado del Puerto es una joya arquitectónica y un sitio perfecto para degustar platos tradicionales como el asado, el chivito o las mollejas. Además de los restaurantes, hay puestos de artesanías y tiendas donde podréis comprar productos locales.
En Pocitos se encuentra también el Museo Andes 1972, una visita impactante para quienes quieran conocer más sobre la historia reciente de Uruguay. Este museo está dedicado a la tragedia aérea de los Andes, donde un equipo de rugby uruguayo quedó atrapado en las montañas en 1972. La historia de la supervivencia de los pasajeros es uno de los relatos más conmovedores del país, y en este museo podréis conocer los detalles y ver objetos personales de los sobrevivientes.
Para terminar el día, os recomendamos visitar el Mercado Ferrando, un espacio gastronómico moderno ubicado en el barrio de Cordón. Este mercado ha sido restaurado y convertido en un lugar de encuentro donde podréis probar una gran variedad de opciones culinarias, desde cocina uruguaya hasta platos internacionales. Además, tiene un ambiente muy animado, con música en vivo y una atmósfera ideal para cerrar el día disfrutando de la gastronomía y el ambiente local.
Día 3: para los que buscan un poquito más
Si disponéis de un tercer día o buscáis algunas ideas más para completar la visita, la capital uruguaya aún tiene mucho para ofrecer. Montevideo es la cuna del fútbol mundial, y ningún viaje estaría completo sin visitar el Estadio Centenario, declarado Monumento Histórico del Fútbol por la FIFA. En el estadio se encuentra el Museo del Fútbol, que exhibe trofeos, camisetas y otros objetos relacionados con la historia del fútbol en Uruguay. Es una parada imperdible para los amantes del deporte.
Si estáis en Montevideo un domingo, no podéis perderos la Feria de Tristán Narvaja, en el barrio de Cordón. Esta feria es un verdadero tesoro donde encontraréis desde antigüedades, libros, discos de vinilo hasta frutas y verduras frescas. Es una de las ferias más tradicionales y coloridas de la ciudad, y el lugar perfecto para experimentar la vida local.
Para los amantes del vino, Uruguay es famoso por su Tannat, y las bodegas cercanas a Montevideo ofrecen visitas guiadas y catas. Podéis organizar un tour de medio día para conocer los viñedos y aprender sobre el proceso de producción. Una de las bodegas más conocidas es Bodega Bouza, que ofrece un hermoso entorno y una experiencia completa con cata y maridaje.


















Como veis, Montevideo es una ciudad para recorrer con calma y disfrutar de cada uno de sus rincones. Tomarse un tiempo para observar la vida cotidiana, compartir un mate con los locales o simplemente perderse en sus calles es parte de la experiencia. La ciudad ofrece una amplia variedad de opciones gastronómicas, desde los clásicos asados hasta propuestas internacionales en mercados renovados como el Mercado Agrícola. Además, si visitáis la ciudad entre noviembre y marzo, podréis disfrutar del clima cálido y de las playas de la ciudad.

