Todo sobre Purmamarca: qué ver y cómo visitarlo
Purmamarca es un pintoresco pueblo ubicado en la provincia de Jujuy, en el corazón de la espectacular Quebrada de Humahuaca, un lugar declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y famoso por el Cerro de los Siete Colores. Las montañas ofrecen un paisaje insólito y la pequeña localidad combina la riqueza cultural andina con arquitectura colonial.
NORTE DE ARGENTINA
La tranquila plaza central de Purmamarca, rodeada de puestos con artesanías locales y calles de tierra rojiza, os invitará a conectar con la esencia ancestral del noroeste argentino que tanto nos cautivó. La región tiene una historia que se remonta a tiempos precolombinos, estando habitada por pueblos indígenas que pertenecían a la cultura omaguaca, de ahí el nombre de Humahuaca y de la homónima quebrada. En el caso de Purmamarca, el nombre proviene del idioma aymara y significa "Pueblo de la Tierra Virgen".
Durante la época colonial, fue un importante lugar de paso para las rutas comerciales entre el Alto Perú y el virreinato del Río de la Plata. La iglesia local de Santa Rosa de Lima, construida en el año 1648, es testimonio del legado colonial y, actualmente, forma parte del patrimonio histórico nacional. Además, a diferencia de la mayoría de regiones de Argentina, la provincia de Jujuy ha mantenido su cultura indígena y las tradiciones andinas a lo largo de los siglos, algo que la vuelve muy especial y diferente al resto del país.
Cómo visitar Purmamarca
- En avión a San Salvador de Jujuy que tiene conexiones aéreas con Buenos Aires, Cordoba, Mendoza e Iguazu. Desde Jujuy hay que coger una furgoneta (combi) hasta la terminal de autobús de jujuy, y de allí un bus (omnibus) hasta Purmamarca.
- Si estáis recorriendo el país en transporte público (como hicimos nosotros), llegar a Purmamarca desde Córdoba en autobús nocturno es la opción que más recomendamos. Es económico y una gran elección si queréis viajar despacio e ir disfrutando de los paisajes del noroeste argentino. Aunque no hay un transporte directo entre ambas ciudades, podéis hacerlo con la siguiente combinación de autobuses:
Paso 1: de Córdoba a San Salvador de Jujuy
Las principales compañías que cubren la ruta Córdoba-Jujuy son Flecha Bus y Balut, aunque también suele haber servicio con General Urquiza y Andesmar. El trayecto en autobús dura entre 13 y 15 horas, dependiendo de la empresa y el servicio que elijáis, que puede ser semicama o cama. Los autobuses suelen salir de Córdoba por la tarde o por la noche, lo que permite viajar de noche y llegar a Jujuy al día siguiente. Esta es la fórmula que más nos gusta, y además es económica: el precio oscila entre 15.000 y 25.000 ARS (alrededor de 20€).
Imperdibles de Purmamarca
El pueblo es bastante pequeño pero muy pintoresco y agradable para pasar dos días por lo menos. Purmamarca cuenta con varios lugares interesantes para visitar:
El Cerro de los Siete Colores
Seguramente sea el mayor atractivo de Purmamarca. Famoso por sus estratos multicolores que van del rojo al violeta, pasando por tonos verdes, amarillos y naranjas, resultado de millones de años de procesos geológicos. Al amanecer y al atardecer, los colores del cerro son aún más vibrantes, y lo vuelven un lugar perfecto para admirar sin prisas y fotografiar. El punto exacto idóneo es desde un pequeño montículo que sobresale en pleno centro de Purmamarca.
Paso 2: San Salvador de Jujuy a Purmamarca
Una vez que estéis en San Salvador de Jujuy (la parada es en la nueva terminal apartada del centro de Jujuy), hay que coger otro autobús hasta Purmamarca que está a 65 kilómetros al noroeste de la provincia. Empresas como Panamericano operan esta ruta que suele ser bastante popular, aunque tampoco es necesario reservar con antelación. El trayecto dura 1 hora y media, y el precio ronda los 800-1.200 ARS. Estos autobuses salen varias veces al día, por lo que hay opción de ir a la mañana o a la tarde. Por otro lado, algunos de los buses de largo recorrido como Balut, que llegan hasta la frontera con Bolivia (en la Quiaca), también realizan una parada en Purmamarca, así como a Humahuaca desde donde se puede visitar el Hornocal.
El Paseo de los Colorados
Es un precioso camino circular de, aproximadamente, 3 kilómetros que rodea las famosas formaciones rocosas por detrás de Purmamarca. Esta caminata os llevará a través de paisajes montañosos de tonos rojizos, ofreciendo una experiencia inmersiva en el desierto andino, a la que no muchos visitantes le dedican su tiempo (así que estaréis prácticamente solos). El camino es sencillo, su única exigencia es la altitud del lugar y el sol abrasador. Aunque se puede realizar en coche 4x4, nosotros recomendamos ir a pie y que disfrutéis de la tranquilidad de uno de los lugares más especiales que vais a conocer en Argentina. Os dejamos por aquí la ubicación.
Iglesia de Santa Rosa de Lima
Frente a la plaza principal se encuentra la Iglesia de Santa Rosa de Lima, un pequeño edificio de adobe construido en 1648 y declarado Monumento Histórico Nacional. La iglesia tiene una arquitectura simple, pero está cargada de historia y objetos interesantes, como un altar de madera antigua y varias obras de arte religioso que reflejan la mezcla de influencia colonial y las tradiciones locales.
Plaza del 9 de Julio y Feria de Artesanías
Esta plaza es el centro neurálgico del pueblo, donde los artesanos locales exhiben y venden una gran variedad de productos típicos de la región. La vista de la calle Lavalle que asciende a la montaña es icónica. En la plaza, encontraréis tejidos de lana de llama y oveja, ponchos y jerséis típicos andinos (igual que en Perú o Bolivia), cerámicas, joyería en plata, instrumentos musicales andinos y muchas más cosas. La feria es el lugar ideal para adquirir suvenires a buen precio y un lugar muy animado al atardecer, aunque es bastante turístico.
El Algarrobo Histórico
Cerca de la iglesia, se encuentra este árbol centenario que ha sido testigo de la larga historia de Purmamarca. El algarrobo tiene más de 600 años y es un símbolo del pueblo y un lugar de reunión para los habitantes de la región. Bajo su sombra, se pueden imaginar los tiempos en que Purmamarca era una parada importante en las rutas comerciales del noroeste de Argentina.
Mirador del Cerro Morado
Por último, y para los más aventureros, la caminata hasta el Mirador del Cerro Morado ofrece vistas panorámicas espectaculares de Purmamarca, del Cerro de los Siete Colores y de todas las montañas escarpadas circundantes. Es una subida bastante empinada de unos 30 minutos (más aún teniendo en cuenta la altitud), pero la vista desde la cima merece la pena, especialmente si vais durante el amanecer o el atardecer.
El pueblo de Purmamarca y la Quebrada de Humahuaca son el lugar perfecto para desconectar, sumergirse en la naturaleza y, al mismo tiempo, conectar con las raíces más profundas del noroeste argentino.





