Lo mejor de Bukhara
Una de las ciudades más antiguas y culturalmente más ricas de Uzbekistán, una auténtica joya de la Ruta de la Seda. Bukhara está repleta de arquitectura islámica, mercados tradicionales y monumentos impresionantes que reflejan su importancia en la historia.
UZBEKISTÁN
1. El Complejo de Po-i-Kalyan
Este es el centro espiritual de Bukhara y uno de los conjuntos arquitectónicos más famosos de Uzbekistán y toda la región. El complejo cuenta con varias estructuras importantes:
La Mezquita Kalyan: una de las mezquitas más grandes de Asia Central, construida en el siglo XV.
El Minarete Kalyan: este majestuoso minarete de 45 metros de altura fue construido en el siglo XII y sirvió como faro para las caravanas de la Ruta de la Seda.
La Madraza Mir-i Arab: un seminario islámico activo a día de hoy y uno de los más importantes del país.
2. La Ciudadela Ark
La Ciudadela Ark es una fortaleza que data del siglo V, aunque ha sido reconstruida en varias ocasiones. Fue el centro de poder de los Emires de Bukhara y, actualmente, alberga varios museos en su interior que narran la interesante historia de la ciudad. Desde las murallas de la ciudadela, se puede obtener una de las mejores vistas de la ciudad y de sus construcciones más emblemáticas. Sin duda, os recomendamos visitar la fortaleza al atardecer.
3. El Mausoleo de Ismail Samani
Construido en el siglo IX, este mausoleo es una de las estructuras más antiguas de Bukhara y un ejemplo magnífico de la arquitectura pre-islámica y de la época más temprana. Su fachada de ladrillo está decorada con mucha detalle, llena de patrones geométricos preciosos.
4. Chor Minor
Un pequeño y curioso monumento con cuatro torres que se asemejan a minaretes, aunque no son funcionales. Fue parte de una madraza construida en el siglo XIX y, en la actualidad, es uno de los lugares más fotografías en Bukhara. Si os acercáis por allí, no os podéis perder la tienda de souvenirs más original que hemos visto en todo el viaje, llena de objetos auténticos de la época soviética.
5. El Complejo Lyab-i Hauz
Este complejo está centrado en un estanque que data del siglo XVII y rodeado de edificios islámicos antiguos. Es un lugar perfecto para relajarse y disfrutar del ambiente, además, es un lugar muy popular para tomar algo a orillas del estanque. Sin duda, uno de los mejores planes que hicimos en Bukhara fue pasar la tarde allí.
El complejo incluye la Madraza Nadir Divan-Begi y la Juguetona estatua de Hoja Nasreddin, un personaje popular en las leyendas del Asia Central.
6. Las Cúpulas del Mercado o Tokis
Bukhara es famosa por sus antiguos mercados cubiertos, conocidos como Toki, que se usaban para el comercio de productos de la Ruta de la Seda. Hoy en día, podréis encontrar todo tipo de productos, especialmente telas y alfombras (hemos de decir que son muy bonitas), y son los mejores lugares para comprar souvenirs bastante originales. Los tres mercados más importantes son:
Toki Sarrafon: tradicionalmente se cambiaban monedas.
Toki Telpak Furushon: dedicado a la venta de sombreros.
Toki Zargaron: el mercado de los joyeros.
7. Las Madrazas de Ulugh Beg y Abdulaziz Khan
Frente a frente, estas dos impresionantes madrazas son representaciones de diferentes estilos arquitectónicos y períodos históricos. La Madraza de Ulugh Beg fue construida en el siglo XV y es una de las más antiguas de la ciudad; mientras que la Madraza Abdulaziz Khan, que fue terminada en el siglo XVII, está mucho más adornada y mejor conservada. Es posible acceder a ambas de forma gratuita, aunque en su interior encontrareis tienditas y puestos con souvenirs.
8. El Palacio de Verano del Emir (Sitorai Mokhi-Khosa)
Ubicado a las afueras de la ciudad, este palacio fue la residencia de verano de los últimos Emires de Bukhara. Combina elementos arquitectónicos uzbecos con influencias rusas, lo que lo convierte en una visita cultural bastante interesante. Los jardines y los interiores del palacio son un reflejo del lujo y el estilo de vida de los antiguos gobernantes de la región.
9. La Mezquita Bolo Haouz
Situada en frente de la Ciudadela Ark, esta mezquita del siglo XVIII es conocida por su hermoso iwan (el pórtico) hecho de columnas de madera talladas minuciosamente. Este estilo arquitectónico es muy típico de Uzbekistán.
10. El Santuario de Baha-ud-Din Naqshband
Es templo está dedicado al fundador de la Orden Sufi Naqshbandi, una de las órdenes sufíes más influyentes del mundo islámico. Es un lugar de peregrinación importante para musulmanes de muchos países diferentes.
11. El Parque de Atracciones Samonids
Es un área recreativa muy popular en Bukhara, destinada especialmente para las familias y los niños locales. Si buscáis un parque antiguo y con un aire muy muy soviético, estáis de suerte. Samonids tiene todos los ingredientes para ser el típico parque de la URSS donde encontraréis antiguas atracciones decadentes, pero en funcionamiento, como carruseles, montañas rusas, coches de choque y todo tipo de juegos interactivos. Pero la estrella de todas es la noria que, además, es un gran lugar para disfrutar de las vistas a toda la ciudad. Este parque es un lugar bastante curioso y nada turístico que recomendamos visitar si estáis en Bukhara. Se puede llegar a pie desde el casco histórico en apenas 10 minutos.
12. Central Bazaar
El Bazar Central de Bukhara es uno de los mercados más importantes y vibrantes de la ciudad y de todo el país, donde se puede encontrar una impresionante variedad de productos locales, desde alimentos frescos o en conservas, hasta artesanías tradicionales. Es el lugar perfecto para comprar especias, frutos secos, textiles, alfombras y otros miles de productos típicos. Los bazares en Bukhara (y en todo Uzbekistán) son una parte integral de la vida social y económica, y este en particular es de los más auténticos que hemos conocido. La arquitectura del Central Baazar incluye bóvedas y estructuras tradicionales de la región, lo que también lo convierte en un espacio cultural.
13. Cementerio judío de Bukhara
Este cementerio es uno de los testigos más antiguos y silenciosos de la comunidad judía de Bukhara, el cual tiene una historia muy larga y relevante en la ciudad. Aunque hoy en día apenas quedan unas decenas, los judíos bujaríes han vivido en esta región por más de 1000 años. El cementerio se encuentra apartado del casco histórico y suele permanecer con la puerta cerrada, pero si es acercáis la abrirán. Contiene lápidas que reflejan nombres de miles de judíos bujaríes, algunas de las cuales datan de varios siglos atrás, y es un lugar de gran importancia para la comunidad judía local.
14. Sinagoga de Bukhara
La Sinagoga de Bukhara es un importante símbolo de la complicada historia de la comunidad judía en la ciudad. Está situada en el centro histórico y su interior es precioso y muy bien cuidado. Es un espacio modesto pero lleno de historia y carácter, que ha sobrevivido a lo largo de los siglos a pesar de los cambios políticos y sociales en la región. Si entráis, el rabino os hará un pequeño tour y os contará historias del lugar a cambio de una sonrisa o la voluntad. Eso sí, solamente habla ruso, por lo que es necesario aprender algunas palabras en el idioma o pedirle a alguien que sepa inglés que os haga de intérprete.
Otros aspectos interesantes de Bukhara
Callejuelas del casco antiguo: perderse por las antiguas calles laberínticas es una forma maravillosa de captar la atmósfera de la ciudad. Podréis encontrar infinidad de pequeñas tiendas de artesanía, alfombras, sedas y todo tipo de tejidos (uno de los mejores recuerdos que podéis llevaros de Uzbekistán son las túnicas o trajes de telas).
La gastronomía local: no os perdáis los platos tradicionales como el plov, los manti (empanadas al vapor), el shashlik (brochetas) y el delicioso pan o nan de Bukhara. Sin embargo, la ciudad también cuenta con restaurantes modernos que mezclan lo tradicional uzbeka con cocinas más occidentales. Por ejemplo, el Joy Chaikhana Lounge está en un lugar privilegiado y es ideal para tomar unas cervezas nacionales y cenar algunos platos típicos; en Le Bonnet encontraréis platos más occidentales a buenos precios y en una elegante terraza; y nuestro favorito y el más auténtico es el Sitora Cafe, un pequeño establecimiento familiar con platos uzbekos y de la cocina uigur tremendamente sabrosos y económicos. ¡Os recomendamos mucho todos ellos!