Descubriendo Salta y Cafayate, dos imperdibles del norte argentino

Consejos para el viaje

Para llegar a Salta, la mejor opción es que lo hagáis desde Buenos Aires: hay vuelos directos al Aeropuerto Internacional Martín Miguel de Güemes y el trayecto es de unas 2 horas. Tanto Aerolíneas Argentinas como Flybondi operan diariamente esta ruta y suele ser bastante económica. También se puede llegar en autobús o en coche, aunque el trayecto terrestre desde la capital es muy largo (más de 20 horas).

Alquilar coche es la mejor opción para moverse con libertad, sobre todo para la ruta entre Salta y Cafayate. Nosotros lo hicimos en autobús y la experiencia fue igual de buena, pero si queréis explorar los lugares cercanos a vuestro ritmo y sin prisa, el coche os dará un margen de maniobra mucho más amplio. El clima es seco, por lo que es importante llevar crema de sol y beber mucha agua. La mejor época para visitar es entre abril y noviembre, evitando el calor extremo del verano.

Probar el vino Torrontés y las deliciosas empanadas salteñas es obligatorio. A lo largo del artículo os recomendamos algunos lugares para hacerlo, pero como viene siendo habitual en nuestros artículos de Argentina, os daréis cuenta de que prácticamente en culturizar región y establecimiento la comida y la bebida es de 10.

Excursión a la Quebrada de las Conchas

La Ruta 68 que conecta Salta con Cafayate atraviesa la increíble Quebrada de las Conchas, un área protegida con formaciones rocosas rojizas moldeadas por la erosión del viento y el agua: uno de los paisajes más espectaculares del país.

Estos son los puntos que más recomendamos en la quebrada (os dejamos también algunas fotos y la ubicación precisa de cada lugar para que os lo podáis guardar todo):

• La garganta del Diablo y El Anfiteatro: dos enormes formaciones rocosas con una acústica natural impresionante y los lugares más fotografiados de toda la quebrada.

• Los Castillos: montañas que parecen fortalezas naturales y que se recomienda fotografiar desde este mirador.

• Las Ventanas: rocas erosionadas con agujeros que enmarcan el paisaje como si fueran cuadros.

Cómo llegar: desde Salta, se puede alquilar un coche y recorrer la ruta a vuestro ritmo (son unas 3-4 horas de viaje con paradas). También hay excursiones organizadas desde la ciudad, que es como la visitamos nosotros. Os recomendamos preguntar en vuestro hostal de Salta o Cafayate, incluso en las Oficinas de Turismo de ambos lugares.

Salta la Linda

Salta es conocida por los argentinos como "La Linda", una de las ciudades coloniales mejor conservadas de todo el país. Su arquitectura, plazas y calles empedradas invitan a pasear sin prisa, mientras que sus alrededores sorprenden con quebradas, montañas y viñedos. Para ser sinceros, se trata de un lugar que nos sorprendió muy gratamente.

Qué ver en la ciudad:

• Plaza 9 de Julio: es el corazón de la ciudad, rodeada de edificios coloniales como la Catedral Basílica y el Cabildo Histórico. Es el mejor lugar para empezar a explorar las inmediaciones.

• Museo de Arqueología de Alta Montaña (MAAM): alberga las famosas momias de Llullaillaco, uno de los hallazgos arqueológicos más impresionantes de toda Sudamérica.

• Cerro San Bernardo: se puede subir en teleférico o a pie. Desde la cima se obtienen las mejores vistas panorámicas de la ciudad y es el lugar perfecto para ver el anochecer.

• Peñas folclóricas: Salta es la cuna del folclore argentino. En calles como la mítica Balcarce encontraréis restaurantes con música en vivo y comida típica como empanadas salteñas y locro. Os recomendamos el asador-restaurante Doña Salta, cerca del centro, para disfrutar de unas típicas empanadas salteñas y un vacío, matambre o bife espectaculares, así como tamales y la típica cerveza Salta.

Cafayate, la tierra del vino

Cafayate es la capital del vino en el norte argentino, y es famosa por su variedad de Torrontés, un vino blanco aromático y muy fresco que nos encantó. Este encantador pueblo ofrece bodegas, paisajes y una tranquilidad difícil de encontrar en otros destinos vinícolas del mundo.

Qué hacer en Cafayate

• Visitar bodegas: hay decenas de opciones, algunas de las más recomendadas son Bodega El Esteco, Piatelli, Domingo Molina y Nanni. Muchas ofrecen degustaciones y visitas guiadas. Nosotros os recomendamos visitar Cabras de Cafayate, una visita guiada en las inmediaciones del pueblo en la que podréis degustar quesos de cabra acompañados de varios vinos blancos en un entorno espectacular lleno de animales y en plena naturaleza. Una de las mejores experiencias que probamos en el pueblo.

• Cascadas del Río Colorado: un trekking de dificultad media que lleva a una serie de cascadas en un entorno natural increíble, rodeado de cardones (los cactus típicos de esta zona de Argentina). Os dejamos por aquí su ubicación exacta en el mapa. Nosotros lo hicimos con un guía local y fue una gran experiencia. Podéis preguntar en el alojamiento de Cafayate para que os ayuden a planificar la visita.

• Museo de la Vid y el Vino: ideal para conocer la historia y el proceso de elaboración del Torrontés y otras variedades.

• Helado de vino: un clásico de Cafayate. La heladería Mirador es famosa por sus sabores de Torrontés y Malbec, aunque nosotros nos quedamos con el vino antes que con los helados...

Cómo llegar a Cafayate

Desde Salta son unos 190 km por la Ruta 68. En coche, el viaje dura unas 3 horas sin paradas, pero recomendamos hacerlo con calma para disfrutar de la Quebrada de las Conchas. También hay autobuses desde la terminal de Salta. Nosotros tomamos un autobús en Salta y nos quedamos a dormir en el pueblo un par de noches. El último día hicimos una excursión a la Quebrada de las Conchas y aprovechamos para volver a Salta para coger el avión de vuelta a Buenos Aires.

Nuestra ruta recomendada por Salta y Cafayate

Día 1: llegada a Salta, paseo por el casco histórico, visita al MAAM, atardecer en el cerro Sa Bernardo y cena en una peña folclórica o en un restaurante de empanadas y asado.

Día 2: alquiler de coche y salida temprano hacia la Quebrada de las Conchas, disfrutando de sus formaciones. Llegada a Cafayate por la tarde, con tiempo para visitar una bodega y cenar en el pueblo. Si no, se puede contratar una excursión en Salta y enlazarlo con un autobús que os deje en Cafayate al acabar la excursión.

Día 3: recorrer más bodegas, visitar el Museo del Vino y hacer el trekking a las Cascadas del Río Colorado.

Día 4: regreso a Salta con paradas en los puntos que falten de la Quebrada de las Conchas y vuelta a Buenos Aires.